martes, 29 de junio de 2010

Praderas de México


La pradera es un bioma cuya vegetación predominante consiste en hierbas y matorrales. El clima es templado, entre semiárido y húmedo; hay una estación cálida y, generalmente, otra estación fría en invierno.
Ecosistema
En este
ecosistema las gramíneas, juncales y otras plantas de pastizal o céspedes constituyen la vegetación dominante. Aunque en las praderas de las regiones templadas puedan existir más de 50 especies de plantas vasculares y en las praderas tropicales más de 200, en general, dos o tres especies de gramíneas son las que dominan más del 60% de la biomasa del terreno; aquí habitan grandes herbívoros y aves, además de una gran cantidad de flora. Se desarrollan en latitudes medias donde existen variaciones climáticas a lo largo del año que determinan cuatro estaciones bien diferenciadas. En las zonas donde la precipitación anual supera los 600 milímetros y los suelos son profundos y ricos en materia orgánica se extienden las praderas. La vegetación anual de este ambiente es continua y está representada por las gramíneas, pero éstas han sido prácticamente sustituídas por cultivos de cereales (maíz, trigo, cebada) y oleaginosas (girasol, soja).
Las praderas templadas se encuentran en cinco áreas principales: las prairies (praderas) de los Grandes Llanos de
Norte América, la pampa de Argentina, el veldt de África del Sur, las estepas de Eurasia Central, y rodeando los desiertos en Australia.
Las praderas ocurren generalmente en el centro de los continentes donde la precipitación pluvial es intermedia entre la de los
desiertos y los bosques y donde hay grandes variaciones estacionales de la temperatura (veranos calientes e inviernos fríos). La presencia de árboles ha sido reducida en esta área debido a los fuegos, el pastoreo y ramoneo por herbívoros como el bisonte, venados y caballos, y la precipitación relativamente baja. La mayoría de las praderas han sido alteradas extensamente y ahora son las principales regiones mundiales de producción de cereales como trigo,maíz y otros granos.
Suelos
Los suelos típicos de las praderas son los chernozems, suelos que son alcalinos debido a que, en ellos, el movimiento neto del agua es hacia arriba, arrastrando calcio que se precipita como carbonato de calcio. Los chernozems de las praderas tienen horizontes superiores negruzcos debido a la descomposición constante de las gramíneas formando un humus negro. Las praderas de gramíneas altas tienen suelos más marrones, más ricos en humus y de estructura limosa.
Vegetación
La vegetación dominante en las praderas es la de
gramíneas con algunas plantas perennes y herbáceas no gramíneas entremezcladas en diferentes proporciones en diferentes lugares. La altura media de las gramíneas está correlacionada con la pluviometría; en las praderas norteamericanas se observa un gradiente longitudinal de este a oeste de zonas de pradera alta, media y baja. El aspecto cambia considerablemente: en la primavera, las gramíneas están verdes y las demás especies están en floración, mientras que a mediados del verano predominan las plantas fallecientes de color marrón y produciendo semillas. Algunas estepas, especialmente en áreas más áridas, están dominadas por arbustos y se diferencian de los desiertos principalmente porque se encuentran en mayores latitudes, tienen temperaturas medias menores y tienen una diversidad menor.
Diversidad
La diversidad, tanto
animal como vegetal, es más bien baja en esta zona estructuralmente simple de clima templado. Por ejemplo, usualmente no hay más de dos o tres especies de mamíferos herbívoros grandes en una pradera templada típica, mientras que en algunas praderas tropicales (sabanas) puede haber una docena o más. Las aves son diversas solamente en los humedales y en la vegetación ribereña a lo largo de los ríos.
Las praderas del
Hemisferio Sur que se encuentran adyacentes a bosques tropicales y sabanas pueden tener una mayor diversidad animal que los del Hemisferio Norte. El único grupo de vertebrados que es especialmente característico de las praderas es el de las aves paserinas, alondras, calandrias.
Adaptaciones vegetales
Las gramíneas están bien adaptadas para cubrir el suelo descubierto y son relativamente resistentes tanto al fuego como al pastoreo debido a que sus
hojas crecen desde la base, a diferencia de la mayoría de la plantas donde las hojas nuevas se originan continuamente de las puntas de las ramas. Siempre que su base permanezca intacta, puede haber crecimiento inmediatamente luego de haber sido quemada o comida la parte productiva de las gramíneas. Sus hojas tienen un alto contenido de sílice que desgasta los dientes de los animales que pastorean, y algunas especies no gramíneas son altamente tóxicas para los herbívoros. La mayoría de las gramíneas proliferan por medio de estolones, tallos subterráneos horizontales y que producen nuevas hojas a intervalos regulares. Otras, especialmente en áreas más secas, crecen en mechones lo que les permite resistir la desecación por el viento debido a lo denso de su forma de crecimiento; muchas especies no gramíneas son similares estructuralmente. Las gramíneas son polinizadas por el viento, lo que es muy efectivo en este ambiente abierto.
Adaptaciones animales
Para evitar la depredación en este ambiente abierto, una adaptación importante para los animales pequeños es la de hacer
madrigueras. Algunos de estos animales que hacen madrigueras son coloniales, una probable adaptación a la detección temprana de los depredadores. Algunos carnívoros de tamaño medio están altamente adaptados para excavar en busca de los que viven en madrigueras.
Debido a que es tan abierto y a que facilita el movimiento, este ambiente sustenta grandes poblaciones de mamíferos herbívoros, que forman
manadas para defenderse de los grandes depredadores que los siguen. Las aves que anidan y/o se alimentan en el suelo están muy expuestas a la depredación, y casi todas son crípticas, con rayas marrones en la parte superior y con conductas distractoras bien desarrolladas; la mayoría de ellas cantan mientras vuelan ya que no disponen de ramas elevadas.
Los animales de la pradera
De las praderas de América del Sur son originarios
roedores y otros animales pequeños: vizcachas, maras y cuises, armadillos como los peludos y mulitas, comadrejas, lagartijas y zorros. Entre las aves se encuentran ñandúes, perdices americanas, lechuzas, patos, martinetas, chajáes, teros, chimangos y caranchos. De las especies de pájaros que pueblan los sitios arbolados se distinguen horneros, cardenales, calandrias, benteveos, tijeretas, churrinches y picaflores. En las regiones de pajonales abundan los pechos colorados, las cachirlas y los chingolos.
En América del Sur corren peligro de extinción el puma y el venado de las pampas. En América del Norte los bisontes, que hasta el siglo pasado formaban grandes rebaños, ahora viven en reservas naturales. Por otra parte, también son animales característicos de esas praderas el
tejón americano, la mofeta rayada y el coyote. En las praderas asiáticas se encuentra el antílope saiga, que también frecuenta las estepas.
La fauna de la pradera cumple un papel fundamental en la preservación del equilibrio natural, esencial para la cadena alimentaria. Numerosas especies de animales excavadores de las praderas, al remover el suelo, modifican el contenido
mineral de éste y posibilitan el crecimiento de las especies vegetales. Bajo tierra actúan las lombrices y otros invertebrados que, además, oxigenan el suelo, junto con millones de bacterias que descomponen los residuos orgánicos.
Efectos humanos
Este
ambiente es muy apropiado para casi todos los cultivos de granos, o sea gramíneas, por eso grandes porciones de las praderas templadas han sido modificadas para la siembra de granos. El pastoreo por el ganado vacuno ha ejercido, en muchas áreas, una presión mucho más intensa que los ungulados nativos, cambiando la composición de especies en las comunidades vegetales ya que algunas especies son más susceptibles al pastoreo que otras.
Muchas especies de este ambiente están adaptadas a presentarse en las etapas tempranas de una sucesión; cuando son introducidas en otros continentes, se convierten en malezas
invasoras, colonizando rápidamente lugares alterados y, con frecuencia, eliminando a las especies nativas. Junto con el pastoreo, esto ha cambiado la estructura de las praderas en todas partes, especialmente en Norte América, por lo que son escasas las praderas "naturales".
Investigado por Maribel Cruzado Bonilla

Desiertos de México




Los Desiertos en México
Qué te viene a la mente cuando piensas en un desierto? ¿Calor, arena, piedras, cactus? Es cierto, todo eso existe, pero es MUCHO más que eso. De hecho, caminar por un desierto al amanecer o atardecer y ver las formas de cada planta, los nidos de pájaros en medio de un espinoso cactus, el sol reflejando luces amarillas y naranjas es una de lasexperiencias más misteriosas y bellas. Ahora imagina que estás en un lugar así y te llevaremos por diferentes aspectosdesde su formación hace millones de años hasta aprender acerca de cuales son los tipos de desiertos que existen en
México, su flora y fauna, usos, amenazas y estrategias de conservación.
La formación de los desiertos responde a cambios en clima, ciclos de humedad y sequía combinados con distintas fenómenos geológicos como choques de continentes, surgimiento de montañas o explosión de volcanes a lo largo de miles y hasta millones de años. La combinación de estos elementos produce el ecosistema llamado desierto que a nivel mundial ha sido clasificado según la cantidad de lluvia que cae en promedio en un año. Los extremadamente áridos tienen por lo menos 12 meses consecutivos sin lluvia (Qaidam en China, Sahara en Medio Oriente), los semi-áridos tienen entre 250 – 500 mililitros (entre 1/4 y ½ de tasa de agua al año) y los áridos menos de 250 mililitros al año. En México predominan los áridos y semi-áridos y muy distinto a lo que en general se piensa, están llenos de vida con plantas y animales con interesantes estrategias para nacer, crecer y reproducirse con clima extremo de calor y
frío y con la poca agua que hay disponible. La lluvia cae por diferentes capas del suelo quedándose atrapada en alguna de ellas para formar pozos de donde la toman los animales y las personas que viven por ahí. En otras ocasiones se forman ríos que corren con agua por algunos días y después se secan el resto del año.
En México siempre han existido desiertos, a diferencia de otros ecosistemas (como las selvas húmedas o bosques) que han surgido más recientemente, lo cual los hace sitios muy antiguos y estables, es decir, que no han tenido cambios drásticos en los últimos 50 millones de años. Gracias a esta característica plantas y animales han tenido tiempo y oportunidad para evolucionar y adaptarse a las difíciles condiciones a lo largo de miles y millones de años.
Otro dato interesante en cuanto a desiertos en México es que tienen una topografía muy variada, habiendo sitios muy planos con pastizales como en grandes regiones de Chihuahua, otras regiones con dunas de arena como el Desierto de Altar en Sonora o Cuatrociénegas en Coahuila y otros con escarpadas laderas de montañas lo cual resulta en que puedan existir muchas especies diferentes de plantas y animales. Por ejemplo, en el desierto existen aproximadamente
6,000 especies de plantas, mientras que las selvas húmedas, que dan la impresión de gran variedad y exhuberancia,

Dos de las grandes regiones de desiertos en México son el Desierto Chihuahuense y el Sonorense. El primero abarca desde Hidalgo, Querétaro y Guanajuato hasta Chihuahua, Coahuila y Nuevo León. La zona es desértica porque esta rodeada por tres cadenas montañosas; al este la Sierra Madre Oriental que detiene la humedad del Golfo de México, al oeste la Sierra Madre Occidental que detiene humedad del Pacífico y Golfo de California y al norte (aunque más lejanas) las montañas Rocallosas del lado estadounidense. Estas cadenas de montañas forman una especie de
gigantesco triángulo de tierras con muy pocas lluvias en donde se han desarrollado plantas y animales que han aprendido a lo largo de milenios a sobrevivir en el desierto. En este desierto se encuentran plantas de poca altura y con mucho espacio entre una y otra planta. En medio del desierto también hay algunos picos o montañas que tienen bosques de pino y clima templado (frío), a estas zonas se les llama “islas del cielo” porque parecen islas en medio de un mar enorme, solo que en lugar de agua hay arena y cactus. Un sitio así es la región de Maderas del Carmen (Coahuila), Cañón de Santa Elena (Chihuahua), el Cielo (Tamaulipas) justo en la frontera con Estados Unidos. Resulta Edured
http://www.edured.com.mx _PDF_POWERED _PDF_GENERATED 29 June, 2010, 07:10
interesante que hasta hace 10,000 años toda esta región tenía grandes y hermosos lagos. Después se transformó en un bosque de pinos y encinos durante la glaciación y posteriormente (hace 3,000 años) predominó la vegetación tropical seca.
Muchas de las especies que existieron como elefantes, mastodontes, camellos, llamas y tigres diente de sable desaparecieron debido al cambio en el clima y no lograron adaptarse. Otros como el berrendo se refugiaron en zonas aisladas y formaron poblaciones existentes a la fecha. Todo lo anterior se conoce al encontrar fósiles y estudiarlos.
Esta combinación de cambios a lo largo de millones de años dan paso a que existan sitios con suelos, plantas y animales endémicos. Un sitio así es Cuatrociénegas en la parte central de Coahuila en donde un suelo de yeso muy singular llamado gypsófilo forma dunas de arenas únicas en el mundo que sostienen 6 especies de plantas endémicas.
Al lado de estas dunas se encuentran más de 200 manantiales de agua dulce que al brotar forman pozas, ríos y lagunas cada una con colores indescriptibles de tonalidades en azules y verdes transparentes. Todo esto en medio del desierto.
El Desierto Sonorense también es un lugar de enorme belleza e importancia nacional e internacional; se caracteriza por la presencia de cactus de gran altura como el saguaro o las pitayas. Crecen altos y a veces muy juntos por lo que forman verdaderos bosques de cactus. Este desierto incluye extensas regiones de los estados de Sonora, Baja California, Baja California Sur y parte de Sinaloa. Un sitio de gran belleza dentro del desierto Sonorense es la región de El
Pinacate y Gran Desierto de Altar, en donde hay 10 cráteres y más de 400 conos volcánicos que dan un aspecto lunar al terreno; de estos cráteres fluyó lava y ceniza hace miles de años formando cerros de piedra volcánica quedando una capa de suelo color negro que contrasta de forma muy hermosa con el tono verde de los cactus y matorrales. Otra zona que no puede dejar de mencionarse es El Vizcaíno en Baja California Sur siendo una zona extensísima de desierto (2.5 millones de hectáreas) en la península entre dos mares, el Golfo de California y el Océano
Pacífico. Este hecho lo hace único al tener contrastes entre el desierto y el mar; dunas de arena y vegetación halófita (plantas que existen en zonas de aguas someras o bajas, con altas tasas de evaporación y por lo tanto alta salinidad) con lagunas costeras y manglares. Ahí están las lagunas, como la de Guerrero Negro a las que llegan cada año las migraciones de ballena gris. Al centro de este inmenso desierto se encuentran varias cadenas montañosas, como las
Sierras San José y Santa Clara, encerrando miles de años de historia geológica, artística (pinturas rupestres) y cultural (misiones y fuertes) aún por terminar de descubrir.
Existen culturas milenarias que lograron vivir y adaptarse al desierto como son los grupos seris, pimas, mayos, o´dham y yaquis en Sonora y en Baja California los kiliwas, cochimies y guaycuras. Desafortunadamente varios de estos grupos se han dispersado e inclusive desaparecido llevando con ellos miles de años de conocimientos acerca del desierto y sus misterios. De los grupos aún existentes hay mucho que aprender. En promedio 700 mm es lo que llueve en un desierto mexicano al año.
¿De que nos sirven los desiertos? Es decir, ¿de qué servicios ambientales nos provee?
El servicio ambiental más cercano a nosotros es la generación de bienes como maderas, fibras y alimentos provenientes de distintas especies de plantas y animales del desierto. Los desiertos además amortiguan inundaciones ya que al mantenerse estable la vegetación, permite que se filtre de manera adecuada el agua de lluvia. La generación y renovación de suelos también se lleva a cabo en el desierto así como en otros ecosistemas; es decir que el proceso natural de
nacimiento, muerte y descomposición de plantas y animales genera y mantiene los suelos. Solo en estado natural y sin alteraciones importantes podrá el desierto proveer otros servicios ambientales como la polinización, dispersión de semillas y el mantenimiento de la información genética de plantas y animales.
Edured
http://www.edured.com.mx _PDF_POWERED _PDF_GENERATED 29 June, 2010, 07:10
Estos son algunos de los animales y plantas que existen en las zonas desérticas de México, sin olvidar que cada desierto tiene sus particularidades y especies que no son idénticas para cada uno: Mamíferos: Lince, puma, jaguarundi, tigrillo, zorra gris, coyote, borrego cimarrón.
Reptiles: Iguana negra, iguana verde, camaleón, chuckwalla, serpiente coralillo.
Aves: Pájaro carpintero, colibrí barba negra, papamoscas cenizo.
Anfibios: Rana leopardo y sapo de espuelas.
Peces: Pez pupo cachorrito del desierto y pez espada de Cuatrociénegas.
Plantas: Yuca, ocotillo, sahuaro, cardón, lechugilla, nopal, mamilarias, maguey, gobernadora, palo fierro, mezquite, cholla,
salvia, jojoba, etc.
Fuente: FONDO EDUCACIÓN AMBIENTAL, A.C.
Investigado por Luis Felipe Pérez Barroso.

Instrucciones para el alumno

1. Analizar la información.

2. Investigar acerca del Bioma elegido.

3. Crear una presentación en el formato de su elección ( cartel, historieta, mapa mental,etc. )

4. Subirlo al blog.